La Guardia Civil, en el marco de la operación 'Rigidity', ha detenido a los 31 presuntos integrantes de una organización delictiva de origen británico, asentada en la Costa del Sol desde 2015, dedicada al tráfico de drogas y que operaba en las costas de Andalucía, una operación que su última fase culminó con la detención del cabecilla y registros en Motril (Granada), El Ejido (Almería) y las localidades malagueñas de Estepona y Fuengirola.

Según detalla en una nota de prensa la Benemérita, la investigación se inició a raíz de conocer que una organización dedicada al narcotráfico pretendía asentarse en la provincia de Málaga. Con el avance de las investigaciones, se acreditó que los mismos pretendían introducir hachís a través de veleros por distintos puertos de la geografía española.

Resultado de las primeras averiguaciones se llegó en a la incautación en el verano de 2015 de 1.910 kilogramos de hachís, que intentaban introducir en sendos veleros a través del puerto deportivo de Sotogrande, en San Roque (Cádiz), procediendo entonces a la detención de tres personas.

Prosiguiendo con las investigaciones sobre este grupo criminal, nuevamente les fue detectada una nueva operativa en septiembre de 2016, donde en esta ocasión el puerto elegido fue La Alcaidesa en la Línea de la Concepción (Cádiz), donde fueron intervenidos 690 kilogramos de hachís y de las tres embarcaciones que tenían en su poder, procediendo en esta ocasión a la detención de seis personas que eran los encargados del transporte y descarga (braceros) de la droga.

La investigación continúa y los guardias civiles descubren que esta organización había realizado contactos para su actividad ilícita en puertos de todas las provincias de Andalucía y en Tarragona.

Por último, y tras detectar en septiembre de 2019 la llegada a España del líder de la organización para coordinar 'in situ' la operativa de narcotráfico, permitiéndose así reactivar la investigación, e identificar asimismo a las personas que en la actualidad financiaban las actividades ilícitas y vista la intensa actividad desarrollada por el mismo ligada al narcotráfico, llevó a la interceptación en marzo de este año de dos nuevos barcos.

Los barcos navegaban por aguas españolas cargados con 666 kilogramos de hachís, procediendo en esta última etapa de la investigación a la detención de 22 personas, de nacionalidad británica, holandesa y española, estos últimos dando apoyo logístico a la organización investigada, y a la realización de realizado siete entradas y registros en localidades de Motril (Granada), El Ejido (Almería) y las malagueñas de Estepona y Fuengirola.

La operación, en la que finalmente se han detenido a 31 personas e intervenido 3.226 kilogramos de hachís, ha sido dirigida y tutelada por el Juzgado de Instrucción número 1 de Marbella (Málaga) y desarrollada por el Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga de la Guardia Civil de Málaga (EDOA), del Equipo de Contra el Crimen Organizado (ECCO) de la Unidad Central Operativa y el Órgano de Coordinación de Operaciones contra el Narcotráfico (OCON SUR), así como de las comandancias afectadas. Además, la Guardia Civil ha contado con la colaboración estrecha de la Agencia Criminal del Reino Unido, la NCA.