Alzira solo destinará las ayudas escolares a las familias empadronadas en la ciudad

El Ayuntamiento de Alzira estudiará acotar las ayudas que se ofrecen a los escolares a aquellas familias empadronadas en la ciudad para evitar un hipotético efecto llamada que pudiera explicar la elevada demanda de plazas que se registra una vez cerrado el proceso ordinario de matriculación que, como ayer adelantó Levante-EMV, este curso ya contabiliza 655 altas, casi tantas como todo el curso pasado (671). Este número de alumnos permitiría llenar un colegio entero.

Alzira recibe tras el inicio de curso un alud de alumnos que llenaría un colegio entero

El anuncio lo realizó el alcalde de Alzira, Alfons Domínguez, en la sesión del Consell Escolar Municipal que abordó el problema que representa este goteo continuo de demanda de plazas, que ha obligado a habilitar nuevas aulas en diferentes centros aprovechando bibliotecas o salas de informática, pero también a aumentar las ratios dentro de los márgenes que permite la normativa. Domínguez confirmó ayer que se va estudiar establecer el empadronamiento como requisito para poder optar a estas ayudas al tratarse de fondos municipales, si bien también advirtió de que esta medida tendrá previsiblemente un impacto limitado. 

Según explicó, los técnicos comentaron que en estos momentos pueden optar a las ayudas todos los alumnos que se escolarizan en la ciudad. Durante el debate suscitado en el Consell Escolar se comentó que algunos ayuntamientos de pueblos vecinos ya exigen el requisito del empadronamiento para conceder ayudas.

El ayuntamiento cuenta con líneas de ayuda para el comedor y la compra de material escolar

El área de Educación del Ayuntamiento de Alzira únicamente realiza una convocatoria pública de becas para material escolar en el segundo ciclo de Educación Infantil, si bien cuenta con dos tipos de ayuda asistencial para el comedor escolar.

Ayudas para el comedor escolar

Por un lado, y en base a la baremación que realiza la Conselleria de Educación, el consistorio complementa la asignación económica a aquellas familias que reciben las becas más bajas y ayuda a familias necesitadas que no pueden recibir fondos de la Generalitat por diferentes motivos, en muchos casos por la existencia de alguna deuda.

Por otra parte, también asume el coste del comedor de otros escolares en situación de vulnerabilidad en base a los informes que pueda recibir del departamento de Servicios Sociales. Este procedimiento también se aplica para asignar ayudas para la compra de libros, mientras que sí realiza una convocatoria en el caso de las ayudas para la adquisición de material escolar en el segundo ciclo de Infantil.

La concejal de Educación, Virtuts Piera, reconoció tras el Consell Escolar la preocupación que genera este problema, señaló que el ayuntamiento tiene la obligación de escolarizar a todos los niños que lo solicitan y comentó que resulta muy complejo identificar las causas de esta elevada demanda de plazas fuera del proceso ordinario.