Ya contamos hace meses en estas mismas páginas el relevo generacional en la bodega Chozas Carrascal, compañía fundada por Julián López y María José Peidro que ahora dirigen sus hijos Julián (responsable técnico) y María José (marketing, gestión y comercialización).

Tras el 'traspaso de poderes' -aunque Julián y María José senior siguen estando al pie del cañón- ha llegado el momento de lanzar al mercado la primera línea de vinos creada a partir de la sabiduría y experiencia de la primera generación junto a la visión y el carácter innovador de la segunda. Se trata de 'Anma', una gama compuesta por dos vinos de finca: un blanco de carácter varietal, complejo y con buen volumen en boca en el que Julián ha hecho un interesante trabajo jugando con la crianza en fudres y depósitos ovoides de hormigón; y un tinto fino, floral, rico en matices, complejo y elegante, elaborado con uvas de Garnacha y Syrah que descansa 12 meses en fudres de 5.000 litros, con lo que consigue volumen y estructura sin que la madera maquille las cualidades frutales del vino.