El Valencia Basket no baja el ritmo. Las de Rubén Burgos siguen invictas en la Liga Femenina Endesa tras sumar su sexta victoria consecutiva en otras tantas jornadas. Esta vez, su ‘víctima’ en la Fonteta ha sido el Embutidos Pajariel Bembibre en partido que se disputaba este miércoles 21 de octubre. Seis de seis. Las leonesas sólo aguantaron el primer cuarto en el que incluso dominaron durante muchos minutos. Los otros tres fueron de color taronja, un auténtico recital. El Valencia Basket supera así con sobresaliente el primer partido de esta intensa semana en la que el sábado visitará también la cancha del Girona. El Embutidos Pajariel sorprendía con dos triples consecutivos a cargo de Higgs y Rhine que abrían el partido y la primera brecha en el marcador 0-6. Una inspirada Laura Gil decidía tomar las riendas del partido impidiendo que la ventaja visitante aumentase. La remontada no tardaba en llegar. El primer cuarto se cerraba con 21-19.

La ventaja en el marcador daba tranquilidad y que permitía que las de Burgos, en el segundo cuarto, ya de forma decidida, tomasen las riendas del partido. El Valencia Basket abría su abanico de posibilidades y varias jugadoras como Allen, Leticia Romero y Juskaite tomaban el relevo de Gil. Los triples empezaban a caer en el marcador taronja, el Embutidos Pajariel perdía la confianza en ataque y en defensa se veía ahora desbordado. Las locales aumentaban su ventaja minuto a minuto. El parcial era ya de escándalo: 18-0 para las taronja que se iban al descanso con 13 puntos de renta (46-33).

El paso por los vestuarios, lejos de ‘enfriar’ la máquina taronja, contribuía reforzaba el dominio local. La apisonadora no paraba, seguía sumando. Las de Burgos se divertían en la cancha, anotaban en estático, de contraataque, de tres, de dos... La ventaja no cesaba de crecer 57-33 (min. 25). Las leonesas no encontraban fisuras en el juego valenciano. La ventaja alcanzaba los 30 puntos al final del tercer cuarto (70-40). El último, sería ya un plácido paseo para las locales con un Bembibre rendido ante la superioridad taronja.