El Grup del Dijous a l’Octubre, colectivo formado por sacerdotes y cristianos progresistas, reprobó ayer la polémica en torno a «Poder i santedat», la obra de Manuel Molins que se estrenará en el Teatro Principal el próximo 23 de octubre, una semana después de lo previsto. «El Grup del Dijous a l’Octubre reprobamos la petición de retirada de la programación de esta pieza teatral. Igualmente consideramos desproporcionada, parcial e ideológicamente sesgada la calificación de ataque a la libertad de religión, ya que no hay ninguna relación entre la representación y la práctica voluntaria de cualquier acto religioso», aseguró Honori Pasqual.

La Asociación de Abogados Cristianos pidió retirar la obra, al igual que el arzobispo de València, Antonio Cañizares. La pieza trata temas como la pedofilia, la corrupción, el feminismo o la honestidad en el seno de la Iglesia. «La crítica a cualquier religión o institución religiosa siempre puede ser un revulsivo a la tendencia dogmática y cerrada propia de toda institución histórica. Invitamos, por lo tanto, a todas las religiones a la aceptación de la crítica y a la práctica de la autocrítica», continuó Pasqual.

Otra de las instituciones valencianas que se ha sumado a la repulsa es el Consell Valencià de Cultura.