El Bloc celebró ayer su tradicional «Aplec del Puig» en el último domingo de octubre con un acto reducido en València en el día en que el Gobierno decretaba el segundo estado de alarma.
El acto sirvió para que el principal partido de Compromís reclamara políticas mas valientes al Consell del Botànic, aunque no gusten a los socios. La coordinadora nacional del Bloc, Àgueda Micó, también coportavoz de Compromís, aseguró que si la coalición no existiera, el Botànic perdería valentía y firmeza.
«La valentía es decir aquello en lo que creemos aunque a tus socios no les guste», aseguró Micó en referencia a cuestiones como la ampliación del puerto de València, donde los socios discrepan, o la reforma fiscal que la coalición ha propuesto y que recoge entre otros subir el tramo autonómico del IRPF a rentas de más de 140.000 euros, un impuesto a grandes propietarios de viviendas que estén vacías o gravar las bebidas azucaradas, el transporte de energía o a empresas de telefonía.
«No nos callaremos, ni el valencianismo bajará la cara», anunció Micó en la parte más política del discurso. «Yo no conozco a nadie que gane 140.000 euros, subir impuestos a estas rentas no es revolucionario, lo dicen los técnicos de Hacienda y esto nuestros socios de gobierno no lo tienen tan claro», lamentó Micó.
La lideresa del Bloc, que optará a la reelección al frente del partido en el próximo congreso, reivindicó la labor de Fran Ferri en las Corts y de Joan Baldoví en el Congreso. «Si molestamos es que lo hacemos bien», insistió.
También llamó Micó a reforzar el autogobierno contra las fuerzas reaccionarias y centralistas y denunció que existe un aparato del Estado, heredero del franquismo, «que nos quieren hacer bajar la cara» contra el que pidió valentía.
Entre los reconocimientos, el colectivo MIR, el alcalde de Daya Vieja (Vega Baja) Jose V. Fernández y el histórico Enric Tàrrega.
Compensación de 1.325 millones en las cuentas del Estado
